EL EXAMEN OBJETIVO de las razones por las
que Hipólito Mejía perdió las elecciones 2012 presenta un menú de opciones amplio
y diverso. Mas hay 3 fundamentales: 1) El triunfalismo o el odio que lo condujeron a rechazar el acuerdo post
convención que le solicitó Miguel Vargas, acuerdos como los que hicieron Guzmán y Salvador para
ganar en 1978 y 1982; 2) Los múltiples errores que desencantaron a parte de la clase
media de endosarle su apoyo; y 3) Una estrategia de campaña que no aprovechó vivas contradicciones entre peledeístas, en las que hoy, como ayer, Félix Bautista es pelotero fundamental.
LA PARADOJA es que el Bautista fue pieza clave en la decisión de que el Estado pisara el acelerador a fondo para atajar a
Hipólito, cuando amenazó con trancar a Leonel y a sus colaboradores más
cercanos. Pero hoy, producto de la versión actual de aquellas contradicciones, el Félix podría ir
tras las rejas… y Mejía sigue soñando con La Ñoña para mandar a trancar gente sumariamente.
EL FARDO de acusaciones que hace el procurador Domínguez Brito al Bautista es escandaloso: Dado el contexto de irrespeto a la Carta en que jugamos, la menos grave es "atentado contra la Constitución", por lo que aquí no se cae preso. Pero "falsedad de escritura pública y privada, uso de documentos falsos, prevaricación, desfalco y asuntos incompatibles con la calidad de funcionario público..." suenan duro. El Félix, de su parte, devuelve el fuego a Domínguez Brito, afirmando: “El que me acusa no es un procurador general de la República, es un candidato político, lo que es muy grave y traiciona incluso la confianza depositada en él por el presidente Danilo Medina”.
Es con duro que están jugando los peloteros de las cachuchas moradas. El Bautista no sólo anunció ayer que se despoja de la inmunidad parlamentaria para defender su honor puesto tan en entredicho sino que poco antes de ser presentado en el escenario que le monta Cavada en el 11, tuiteó anoche a sus seguidores que lo acompañaran a ver su demostración de que es ¡persiguiéndolo políticamente! que están... La pelota morada está tan caliente como la que se está jugando entre Kansas y Frisco.
SEGUNDO FRACASO DE JBD. Roberto Álvarez
reveló ayer en carta a Orlando Gil que la línea de Juan Bolívar Díaz de pedirle
a Hipólito que se retire y apoye a Luis, tuvo una segunda caída. Álvarez relata que junto al comunicador y el dirigente político Pedro Catrain fueron a pedirle a Mejía lo que no consiguió antes JBD cuando le tiró a Mejía el regalito envenenado de que fuera “el líder”, y
no el candidato del PRM. Segunda de Juan, frente a Hipólito. No aprende Juan que la política se decide con buenos hechos políticos, no con comunicación. Que los políticos hacen comunicación, buena o mala, y se ayudan o no, pero que la comunicación no dirige a la política. Peca del viejo vicio de los profesionistas, quienes asumen que los mundos son dirigidos por sus capacidades, y no por procesos económicos, sociales y políticos. Apena verlo a Juan volverse como Canuto.
PUER PECHO NO... le dejó saber Hipólito a esos autocomisionados, pues conforme revela Álvarez el alzao de Cambita no soltó prenda ante los razonamientos de que abandonara el juego y perdiera por forfeit. Hay que decir, en favor de Mejía y sus estrategas, que en su presupuesto está que la favorabilidad de Luis Abinader es bulto mediático, más espuma que chocolate que a la vuelta de febrero a marzo se habrá disuelto y que serán entonces cuando echarán el pleito. 
REESTRUCTURACIÓN de los organismos es lo
que va, dice Mejía desde su loma allá en Cambita, dejando en claro que no está
en eso de encuestas. El hombre es coherente con el grito hipólito-abinaderista ¡Convención, Convención, Convención!
que repetían hasta el cansancio en el PRD, aunque cuando llegó la hora de la
verdad pusieron ¡pies en polvorosa!, huyéndole a la mayoría con que contaba Miguel Vargas en ese momento en la estructura y organismos perredeístas, y que crece con el paso de los días.
OTRA NOTA reveladora de lo candente que andan las contradicciones al interior del PRM, la pone hoy Teófilo Quico Tabar, a quien se había anunciado como parte de una comisión para organizar la escogencia del candidato por encuestas. Anota Quico que él no es comisionado, que sólo le propusieron que fuera parte, pero que de entrada dejó en claro que no le parecía efectivo el método , que oficiosamente el abinaderismo deja caer que Hipólito aceptó y que ahora recula.
No hay comentarios:
Publicar un comentario