MADUREZ. El documento entregado en rueda
de prensa hoy por Orlando Jorge Mera, Alfredo Pacheco, Janet Camilo y Yayo Sanz
Lovatón, tiene un contenido de madurez y pragmatismo político . Reconocen que en su partido quizás las cosas no andan todo lo bien
que quisieran (¿En cuál partido está todo bien, color de rosa?), pero es su PRD, del que no se van, y apuestan a que desde adentro pueden
contribuir a resolver, e incluso llaman a la unidad…eso sí, “sin odios ni rencores”.
Qué bien.
CASCADA. La determinación de Pacheco, OJM,
Janet, y Yayo agrega valor al
efecto cascada que se viene produciendo en el PRD en todo el país y en las seccionales
del exterior. Antes entraron figuras como Leivin Guerrero, varios alcaldes,
entre quienes destacan Tavito Suberví y Chacho Landestoy, pero son decenas,
cientos de dirigentes que, como Chacho, dicen “Yo no me voy del Jacho”.
UN PESO PESADO, miembro de la
Comisión Política, por más señas, se integra a las labores del partido con
entusiasmo junto a Yayo, Janet, Pacheco y OJM. Cuando el río llueve, perdón, cuando el río suena, es porque
agua trae, y mucha.
ESTAR EN LA PIEL DE LUIS. Hay gente
sacándole punta a que en par de escenarios en los que presidente Medina se ha
movido con Miguel Vargas y Luis Abinader, parecería como que el mandatario
privilegia a Luis. El comentario podría quedarse como parte de la chercha que tanto gusta en nuestra fauna política. Pero ¿qué podría significar eso? ¿Qué el sector peledeísta de
Danilo asumiría a Luis como opción presidencial morada para el 2016? Eso no da.
¿Qué prefieren a Luis y compartes como opción que se lleve a la Convergencia una parte de
los votos del PRD? Pudiera ser.
ENTRE GADEJOS y pespuntes de buenta
tinta, hay que meter, empero, la verdad de a puño del documento de Janet, Yayo,
OJM y Pacheco, quienes afirman que la división del PRD, “favorece la
continuidad del PLD en el poder”. En esa perspectiva, no es cómodo estar en la piel de un Luis a la que le estaría dando brillo el partido de gobierno, según los comentarios.
NO NOS DA, tampoco, que Danilo Medina esté
tras un laborantismo impropio de la amplitud de miras y el sentido de gran
estadista con que se viene manejando en el ejercicio del poder, y lo suponemos suficientemente avezado como para no comprometerse en
combinaciones que pueden resultar extemporáneas, cuando tanto a lo interno del
PLD como en el plano político nacional ¡todo está por definirse!
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